Fundación en la India

“Mirad que hago algo nuevo, ya está brotando no lo notáis? (Is.43,20)

Ciertamente es algo nuevo, impensable, desde nuestra óptica humana es algo que no podríamos esperar que sucediese, pero ya esta brotando y no notamos; “es el Señor quien lo ha hecho, esto ha sido un milagro patente”.

Ni si quiera en el pasado año 1997 cuando nos visitaba el obispo indio Reverendo Johannes Gorantla de la diócesis de Kurnool, siendo nuestro huésped durante cinco días y nos invitaba a visitar su diócesis con gran insistencia, lo veíamos como posibilidad para nuestra comunidad, tan pobre en medios humanos; pero fuimos a la india en Marzo del 1998 por vez primera, porque así lo decidió nuestro capitulo conventual y de ahí se fueron sucediendo los acontecimientos de manera que todo ha desembocado en estos humildes y sencillos comienzos que hoy vemos. Ya conocen nuestros lectores más o menos como se han ido desarrollando los hechos, el Señor nos ha ido llevando “sobre alas de águila” o “como un hombre lleva a su criatura”.

 

Viajamos en Marzo del 98 como digo, maravillosa la acogida ¡ cuantas cosas podría contar de nuestro viaje. La fe, la religiosidad de estos cristianos “de Santo Tomás” como ellos gustan llamarse, es viva, es práctica, no se da separación entre fe y vida, allí es cierto que cada familia es una iglesia doméstica. La lectura de la Palabra, el rezo del rosario, todo en familia, la participación diaria en la eucarística es allí lo más normal, y a las seis de la mañana!. No falta en cada casa el pequeño altar al Corazón de Jesús ante el cuál se hacen los rezos; nadie saldrá de casa para emprender un viaje sin reunirse ante él para una breve lectura de la Biblia y algunas oraciones. A la hora del rosario del apaga el televisor donde lo hoy, cada misterio del rosario lo reza un miembro de la familia, yo he visto hasta algún niño de seis años rezando el que le correspondía.

El sentido de familia, el sentido de hospitalidad es algo sorprendente. Desde luego el estado de Kerala es la región más cristina y católica de la India reconociendo que también en otros estados hay numerosas comunidades cristianas seriamente comprometidas con el Evangelio. Las vocaciones son todavía muy abunda mentes, los mercedarios que inauguraron la casa en marzo del 98 tienen ya cuarenta y cincos jóvenes en formación, los Escolapios setenta y así otros. Hemos visitado dos comunidades de vida contemplativa Clarisas y Carmelitas, y de verdad que con las lógicas diferencias nos hemos sentido muy identificadas con ellas, los locutorios se pueden parecer a cualquiera de los nuestros, pero unos años atrás, claro. Tienen como medio de subsistencia elaboración de formas, costura, cultivo del propio terreno…

 

Han sido experiencias muy hermosas a nivel comunitario y personal, que ya nos gustaría saber comunicarlos para que con nosotras deis gracias a Dios, ya que la fundación no es sólo de la comunidad de Marchena sino de la Orden. Sentimos muy vivamente la fuerza de vuestra oración, que Dios os lo premie.

Queríamos entrar con buen pie en el nuevo milenio y el Señor nos ha llevado de la mano.

Una comunidad de Mercedarias Descalzas en la India nos parecía tan hermosa la idea, como tan lejana e irrealizable para nosotras, sin embargo el Señor es el que ha puesto en nuestros corazones este deseo y vemos que lleva trazas de convertirse en realidad. Las orientaciones del Papa van en esa dirección y conociendo su invitación a las ordenes contemplativas a fundar particularmente en Asia, África, etc., donde la vida contemplativa tiene menos tradición y es menos conocida, nos sentimos más seguras de que este deseo nuestro, lo es de Dios. Así estas iglesias se verán enriquecidas con el don del Espíritu Santo, que es la contemplación. ¡India lugar de tantas esclavitudes en contraste con tanta y tan profunda espiritualidad, hay allí incontables formas de esclavitud a las que hemos de hacer frente desde nuestra vida de contemplación en la oración silenciosa, es la mejor manera de visitar y redimir a nuestros hermanos; No hay limites ni distancia para una mercedaria que de verdad quiera vivir su carisma contemplativo – redentor. Queremos que en aquellas lejanas tierras de tradición cristiana de siglos se haga presente nuestra orden con testimonios de pobreza y sencillez evangélicas, oración y alabanza continua “La Vida contemplativa pertenece a la plenitud de presencia de la Iglesia y por ello es necesario establecerla en todas las nuevas Iglesias”, la Iglesia en India es antigua y nueva a la vez.

 

Creemos no haber obrado con precipitación, pues desde el 98 que fue nuestro primer viaje de orientación y conocimiento de la tierra y de las gentes, no hemos hecho sino orar, reflexionar y dialogar fraternalmente en la búsqueda de la voluntad de Dios sobre nosotras así ya en el dos mil Sor Mercy Jacob en visita a sus padres sabe de esta casa, nos lo comunica y comenzamos a considerar la posibilidad de comprarla y se estudia en Consejo y en Capítulo de asuntos reunido para información y dialogo, dejando después un tiempo de reflexión y oración. En una segunda convocatoria fue sometido a votación con resultado positivo; a partir de aquí comenzamos a buscar la ayuda económica necesaria y lo primero fue publicar una petición en el ABC, por iniciativa de Don Miguel Revilla San Martín, sacerdote de Alcorcón. Al que nos une una sincera amistad a quien le vivimos muy agradecidas. La respuesta fue la generosa aportación de un grupo de personas a las que desde aquí quiero manifestar una vez más, nuestra gratitud sincera; no puedo publicar los nombres de quienes más generosamente han contribuido, ellos desean permanecer en el anonimato, “porque en el Evangelio leemos aquello de – que tu mano izquierda no sepa lo que hace tu derecha -” son sus palabras.

Todo esto sucedía en marzo de 2000 y en septiembre día 27, viajábamos de nuevo a la India regresando el día doce de noviembre, alegres y agradecidas al señor por todos los bienes que habíamos recibido de su mano en estos días y quizás un poco preocupadas porque ya íbamos adquiriendo un compromiso que nos obligaría a no demorar la vuelta de algunas hermanas para permanecer y dar continuidad a aquellos comienzos.

 

Fue en este segundo viaje, el día 27 de octubre de 2000, el elegido por nuestro obispo Reverendo James Pazhayattil para la bendición de nuestra casa y celebración de la eucarística no eran estos nuestros planes, pero así lo dispuso el Señor, que el propio Señor Obispo lo decidiese. Fue en verdad hermoso, no sé si es correcto hablar de una “ solemne sencillez” pero la verdad es que fue solemne y sencillo a la vez familiar y entrañable; el saloncito habilitado para Capilla, es pequeño, pero se prolonga con la entrada y podía haber allí treinta personas más la mayoría que estaban afuera en el jardín, vino a ser un total de doscientos asistentes y digo “asistentes” porque no todos eran “fieles” ya que había un buen número de personas de religión Hindú que se sentían felices de acompañarnos. En nuestra improvisada Capilla, como pueden imaginar todo era prestado, la colaboración de las hermanas de “Holly Family” fue generosa y la Capilla quedo de lo más vistoso, pudimos contar con una imagen de Ntra. Stma. Madre para presidir la celebración traída por nuestras hermanas Mercedarias de Ben – noor, a dos Km de nuestra casa, que nos alegraron con su presencia fraterna.

Concelebraron con el Señor Obispo, nuestro Párroco y Capellán Padre Job, y tres sacerdotes. Los cantos estuvieron a cargo del coro de la parroquia el Señor Obispo expuso magistralmente la fundación y carisma de nuestra Orden y el nuestro como contemplativas dentro de ella. Al Señor Obispo le urgía irse y al terminar la eucarística tomó sólo un sorbo de té y se despidió de nosotras.

Los sacerdotes y hermanas fueron tomando por tornos el desayuno, en la única mesa de que disponíamos, y fuera en el jardín todos departían alegremente tomando un par de “chapatis” con un salsa preparada allí en el jardín sobre unas piedras. A nuestro regreso como en el mes de noviembre de 2000, como he dicho, comenzamos a tratar sobre la mejor fecha para volver y quienes y cuantas, habrían de ir. Nos aconsejamos con personas de experiencia e informamos en su momento a nuestro Padre General y al Vicario Episcopal para la Vida Consagrada. También nos entrevistamos con Don. Manuel Portillo, delegado Episcopal de Misiones y Ecumenismo, nos orientó en muchas cosas en cuanto a conocimiento de la Iglesia Siro Malabar. Nos recomendó mucho que leyésemos el decreto conciliar sobre las Iglesias Orientales y qué cosas habríamos de tener en cuenta sobre todo a los comienzos. El es un gran conocedor de la Iglesia de Rito Siro Malabar.

 

Nuestra diócesis es la de Irinjalakuda, en el distrito de Trissur en el estado de Kerala. No hay en ella ninguna comunidad de vida contemplativa y el Obispo esta feliz de que vayamos nosotras.

Ya en el mes de Marzo después de habernos reunido en Consejo varias veces, fue designada Sor .Trinidad Montes con Sor. Mercy Jacob, fijando la fecha para el 29 de Abril.

El 19 de Abril, nos entrevistamos en Sevilla con nuestro Vicario, P.Antonio Alcayde, para informarle de todo lo proyectado con detalle, vamos Sor.Trinidad Montes ,Sor. Mercy Jacob y yo. Hablamos de la posible celebración de la Eucaristía en casa, presidida por él, para el “envío” de las hermanas. No fijamos el día, pero él acogió la idea con gran interés. Tenemos que agradecerle además de sus orientaciones y consejos, su aportación económica ¡Dios se lo premie!